XIX Español

Nace en Madrid el 9 de febrero de 1817 e inicia su formación en la Academia de Bellas Artes de San Fernando, donde tiene como maestro a José de Madrazo y Agudo (1781-1859), primer miembro de la prestigiosa saga familiar. Alejado del academicismo de la enseñanza oficial, complementa su formación con las visitas al Museo del Prado. Allí estudia la obra de los grandes maestros de la pintura española, centrándose sobre todo en la producción de Francisco de Goya (1746-1828), cuya obra juega un papel fundamental en la configuración de su estilo.

Su admiración por las composiciones goyescas le lleva a desarrollar un lenguaje cargado del más puro espíritu romántico. Hereda del maestro su veta brava, caracterizada por una pincelada fluida y expresiva, así como su imaginario popular y costumbrista, que le proporciona un éxito rotundo durante toda su vida. El importante número de encargos que recibe le permite vivir cómodamente y realizar numerosos viajes, que contribuirán a definir su trayectoria.

En 1852 viaja por primera vez a París, donde tiene la oportunidad de conocer la obra de Eugène Delacroix (1798-1863), que ejerce una importante influencia sobre él. Un año después se separa de su primera mujer para convivir con Francisca Villaamil, con quien tuvo cuatro hijos, uno de ellos el también pintor Eugenio Lucas Villaamil (1858-1919), máximo continuador del estilo de su padre. La producción de ambos resulta tan similar que en numerosas ocasiones se ha llegado a confundir, causando problemas de autoría.

En la década de 1860 visita de nuevo la capital parisina, y viaja por Italia y Suiza, estancias que le permiten impregnarse del imperante en Europa en ese momento.

A lo largo de su vida tuvo clientes muy destacados –entre ellos el Marqués de Salamanca− y obtuvo importantes condecoraciones, como los títulos de pintor honorario de cámara y caballero de la , otorgados por la reina Isabel II. Fallece en Madrid el 11 de septiembre de 1870.