Joan Miró

(Barcelona, 1893 – Palma de Mallorca, 1983)

L’Aveugle parmi les oiseaux

1978

grabado (aguafuerte, aguatinta y carborundum) sobre papel (15/50)

107 x 75 cm

Nº inv. 2767

Colección BBVA España



Esta composición es un ejemplo del lenguaje poético del artista catalán, poblado de signos en los que es evidente su riqueza gestual y su libertad creativa.

La utilización del grabado como técnica permite a Miró llegar hasta un público más amplio. Su capacidad de invención y experimentación con nuevos materiales aporta novedades en el proceso de estampación que potencian la expresividad de la obra. Los resultados que obtiene son sin duda los de un maestro que rompe con las formas académicas sin llegar a abandonar la tradición.

A partir de 1967 Miró comienza a utilizar la técnica del carborundum que había inventado Henri Goetz (1909-1989). Frente al grabado tradicional -en el que se trabaja el metal mediante el
, la
o el ácido-, el nuevo material permitía un relieve matérico derivado de una estructura compuesta por elementos muy resistentes a la presión. El aumento del formato del papel, que llega a medir hasta 160 x 129 cm, le permite crear grabados monumentales, tanto por su tamaño como por la profundidad de sus colores y la precisión y poder del trazo, que se ve reforzado mediante la materia que le aporta el uso del carborundum.

A pesar de la presencia del negro, que ocupa una buena parte del papel, esta obra trasmite calma y dulzura. Volvemos a encontrar sus colores de base (rojo, amarillo, verde y azul) y sus signos (las estrellas, las flechas, el ojo). El negro se ha convertido aquí en un color más.