Lucio Muñoz

(Madrid, 1929 – 1998)

Sin título

1969

collage sobre papel

30,8 x 23,6 cm

Nº inv. 36812

Colección BBVA España



El intimismo y la viveza que se desprenden de su creación le han convertido en uno de los artistas más valorados del panorama artístico nacional e internacional.

Aunque sus inicios se orientaron hacia el
, derivado de su profunda admiración por el artista suizo Paul Klee (1879-1940), su ingreso en la escuela de Bellas Artes de San Fernando le permitió conocer a los principales exponentes del realismo madrileño, como Antonio López (1936), Carmen Laffón (1934), Julio López Hernández (1930) o Amalia Avia (1930-2011), con la que se casó en 1960. Con todos ellos compartió no solo una gran amistad, sino también el apego por el entorno cotidiano como medio para transmitir el paso del tiempo.

Su viaje a París, becado por el estado francés, le permitió continuar su formación en contacto con el movimiento llamado 
, que adoptó e introdujo en España justo en el momento en el que se estaba gestando el grupo El Paso. En los años cincuenta, coincidiendo con su estancia parisina, introdujo como vehículo de expresión artística en su obra la madera, trabajada de formas muy diversas y con texturas distintas.

Este
sobre papel, junto con otros seis también en la Colección BBVA, forma parte de una serie de originales fechados entre los años 1969-70 que el artista pudo realizar como modelos preparatorios para una carpeta de serigrafías en homenaje a su amigo y maestro, el pintor y poeta Eduardo Chicharro (1905-1964), uno de los principales exponentes del
.

Al igual que la obra 36808 de la Colección BBVA, el artista introduce en la parte inferior del soporte micromadera, elemento que incluyó de manera sistemática en su obra gráfica de los años sesenta. Utiliza tinta y 
 
para esbozar los elementos deseados y consigue una perfecta armonía entre el dibujo y la madera.