José Manuel Ballester es invitado de excepción durante el proceso de la construcción del gran complejo empresarial Ciudad BBVA. De este modo, y mediante la fotografía, el artista actúa como testigo privilegiado del germen de  lo que él mismo reconoce como “una nueva referencia espacial” en la ciudad de Madrid. 

La belleza formal de la arquitectura será uno de los incentivos de la producción del artista José Manuel Ballester. De forma paralela al proyecto de fotografiado del proceso de construcción Ciudad BBVA, el fotógrafo toma también numerosas imágenes de su arquitectura exterior, interesado por el juego de planos, luces y sombras que generan las lamas que la decoran. En contraste con los Nocturnos, también en la Colección BBVA, esta obra plasma la luminosidad de la luz del día reflejada en la construcción, generando en ella sutiles gradaciones de gris claro de gran belleza. 

Luz, espacio y tiempo, tres de los ejes de coordenadas de la obra del artista. El paso del tiempo entra en juego aquí al reflejar el paso del día a la noche en una Ciudad llena de actividad. En palabras del artista, “la complejidad de la Ciudad BBVA me ha permitido entrar en contacto con un modelo que representa claramente la forma en que se está organizando el futuro de nuestra sociedad”.

Una exquisita abstracción formal, llena de fuerza.