Tellaeche había sido marino, y su conocimiento náutico se manifiesta en el tratamiento y representación del velamen, cuyos pliegues protagonizan la composición.

La aridez del cromatismo, incrementada por el color sepia del soporte utilizado —visible en al­gunas partes—, la plasticidad de las velas y la rotundidad de los volúmenes arquitectónicos son propios del talante constructivo del pintor, que se vale de un uso muy peculiar de la técnica del pastel, en toques inclinados y paralelos que preludian la pincelada de sus óleos.

Esta es una de las obras, de la serie de composición similar, que, tanto al óleo como al pastel, abordaron la representación de los velámenes de los barcos atracados en el puerto guipuzcoano de Orio, que se ve al fondo de la composición y de entre cuyas construcciones destaca la iglesia parroquial de San Nicolás. Cabe destacar la existencia de un pastel de dimensiones y composición casi idéntica a la obra de la Colección BBVA.